Será patatús
Hace unos días, casualmente, cayó en mis manos una vieja historieta de El botones Sacarino. Aunque siempre he sido mucho más aficionado a las aventuras de Mortadelo y Filemón, tengo que reconocer que algunos elementos que formaban el universo de este personaje del genial Ibáñez me resultaban bastante simpáticos.

El botones Sacarino.
Así como las siempre truncadas buenas intenciones de Pepe Gotera y Otilio –más bienintencionado Otilio que Pepe Gotera– o, incluso, del propio Rompetechos, que por repetitivas, me resultaban algo cansinas, Sacarino tenía algo que, pese a que todo se reducía a fastidiar al Director del periódico cada vez que una de sus ideas fracasaba, me obligaba a disculpar su falta de originalidad.
Ese algo se encuentra en la historieta con la que me reencontré hace unos días. En ella, el Presi –tal y como lo llamaba Sacarino–comunica al Dire que van a recibir la visita de don Bienvenido Patatús, uno de los accionistas del DDT, y le encarga que organice su recibimiento.
El Director le contesta que no se preocupe, que don Bienvenido «será patatús«, aunque enseguida rectifica para asegurar que «será bienvenido». Sin embargo, es evidente que, gracias a las ocurrencias que tendrá Sacarino a lo largo de toda la tira, no será bienvenido, sino patatús.
Desde entonces, cada vez que se habla de dar la bienvenida a alguien, no puedo evitar pensar –y a veces decir– que será patatús… digo… será bienvenido.
[La imagen de Sacarino, la encontré aquí]
En realidad, el botones Sacarino es, en cuanto a su argumento, una copia de un personaje del cómic francobelga ( bande dessinée o BD ) , Gaston Lagaffe ( o Tomás el Gafe, en la traducción española ) y, en cuanto a su estética, de otro, quizás aún más conocido, Spirou, en origen, botones del Hotel Moustic, aunque más tarde terminaría desprendiéndose definitivamente de su particular uniforme rojo. Curiosamente, ambos personajes eran dibujados en aquélla época por André Franquin. Tampoco es coincidencia, ya que junto a Hergé, se trata de uno los autores fundamentales de la BD y representante de una de sus escuelas más importantes, la de Marcinelle.
http://www.lacarceldepapel.com/2009/03/10/clasicos-del-humor-sacarino/
@D’Hubert, no es por polemizar, pero ¿no se te ha ocurrido pinchar en el primer enlace del texto? Basicamente, cuenta lo mismo. 😛
Aparte de profundizar algo más, así le ahorro al estimado lector tener que abandonar esta bitácora acudiendo a un enlace de la wikipedia…