De cabeza a Santander
Lo he venido avanzando en las últimas semanas, pero ya llegó el día. En unas horas cojo un avión que me llevará a Santander, capital de Cantabria y ciudad en la que estaré, trabajando, durante las dos próximas semanas.
Entre junio y agosto de cada año numerosas personalidades de todos los ámbitos se dan cita en la ciudad cántabra para participar en los prestigiosos Cursos de Verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, institución que este año celebra su 75º aniversario.
La entidad del evento aconseja que, de cara a su cobertura informativa, se envíe personal desde Madrid para reforzar la labor de los compañeros de la delegación de Cantabria. Estas dos últimas semanas le tocó abrir el fuego a Teresa y, ahora, es un servidor quien tomará el relevo.
Según me cuenta Teresa, durante el día hay bastante trabajo -y muy interesante, por cierto- y por la tarde y la noche diversión, ya que la Universidad nos aloja en las antiguas Caballerizas Reales, muy próximas al Palacio de la Magdalena, sede de los cursos, y que son la residencia de la mayor parte de los asistentes.
Además, para el fin de semana, tengo una gran lista de recomendaciones sobre qué hacer y visitar, por gentileza de Marta, al margen de que, gracias a que estaré en la Península de la Magdalena, dominando las playas de Santander, pienso hacer alguna escapadita hasta las frías aguas del Mar Cantábrico.
En resumen, que entre trabajo, diversión y turismo, no sé si tendré demasiadas oportunidades para acercarme hasta este rincón, al margen de que aún no sé cómo estará por allí el tema del acceso a Internet. A pesar de todo, intentaré tenerles al tanto de lo que vaya pasando y subir alguna que otra foto de vez en cuando. Si no lo consigo, espero que sepan perdonarme.
Últimamente suelo terminar este tipo de entradas con una canción y ésta no debería ser menos.
Me acompañan, mientras escribo en esta calurosa e insomne madrugada madrileña, una lata de Seven Up muy fría y la retransmisión en directo del concierto de The Police en Madrid, dentro del último fin de semana del Rock in Rio y, no sé por qué, viene a mi mente una de sus canciones. De hecho, acaban de empezar a tocarla. Y, bien mirado, es un tema que viene a definir muy bien cómo podría sentirse este blog durante las dos próximas semanas: muy solo.
Porque lo que es seguro es que yo voy a pasármelo bien.
The Police, So Lonely, 1978.
Actualización [06-07-08 19:00]: Con gran alegría, descubro que en las Caballerizas hay varios ordenadores con conexión a Internet y, además, es zona Wi-Fi. Hace unas tres horas que llegué y, aunque algo nublado se está mucho mejor que en Madrid. Apenas he tenido tiempo de deshacer la maleta, comer un bocadillo y dar una vuelta por la Península de la Magdalena, subir hasta el Palacio y disfrutar de las vistas y del olor del Cantábrico.
Me voy a la cafetería, a ver si acaba la final de Wimbledon y me da tiempo de dar otra vuelta antes de la cena. Parece que empieza a refescar. Seguiremos informando.
PD: El blog acaba de superar las 60.000 visitas totales y se confirma la teoría de que no puedo vivir sin un ordenador conectado a Internet.
Me quedo con la versión de Maureen, siempre. 😉
Disfruta, es un placer alojarse en el recinto, que nunca olvidarás.
Saludos desde Cantabria,
JP
Realmente, ¿era necesario?
http://www.blogdecine.com/2008/07/05-friends-al-cine
D’hubert, ese rumor no es nada nuevo y, de hecho, ya lo comenté hace tiempo y di mi opinión, pero ¿me quieres decir qué pinta ese comentario en esta entrada?
JP, no te quepa duda de que disfrutaré. Gracias por el comentario.
Millaquito, es que cualquier versión de Maureen es insuperable. Incluso la de I got you babe. 😉
Disfruta de los cursos de verano de la UIMP. Yo lo hice en primero de carrera y aún lo recuerdo como algo único. Te aseguro que para nada te vas a sentir solo.
No te diré que disfrutaré, Eowyn, sino que ya los estoy disfrutando. 😉