De tipos duros, poesía y novela negra
Hace diez días, Alexis Ravelo anunciaba en su blog que, por fin, la tercera –y presumiblemente última– novela de la saga de Eladio Monroy vería la luz esta semana. Como Alexis es, además de buen escritor, amigo y, en su momento contribuyó a disipar los miedos que me frenaban a la hora de abrazar con ímpetu la escritura (de hecho, es el editor del libro en el que por primera vez firmo una obra de ficción), voy a permitirme hacerles dos recomendaciones.
La primera, es que, si no lo han hecho ya, se acerquen a su librería de confianza más cercana (como diría el propio Alexis) y se hagan con Tres funerales para Eladio Monroy, Solo los muertos o Los tipos duros no leen poesía, las tres obras que protagoniza este viejo marino «violento, sarcástico y sentimental», las tres editadas por Anroart.
Aunque (debo confesar) solo he tenido el tiempo suficiente para leer la primera de las tres novelas de la trilogía, puedo asegurarles que en cualquiera de ellas van a encontrarse con una historia que nada tiene que envidiar a los clásicos de la novela negra, pero con las calles más sórdidas de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria como escenario inigualable. A mí, ya me espera la segunda entrega y, dentro de muy poco tiempo, también lo hará la tercera.
Y en segundo lugar, voy a hacer mías las palabras con las que Alexis convocaba a todos los seguidores de las desventuras de Monroy y aquellos que quieran descubrirlas a la presentación de este nuevo libro, que tendrá lugar mañana a las siete y media de la tarde en la Biblioteca pública del Estado en Las Palmas de Gran Canaria:
«La presentación tendrá lugar el viernes, 15 de abril de 2011, a las 19:30, en la Biblioteca Pública del Estado en Las Palmas (sí, la de la Avenida Marítima, la del derribo) y esta vez estaré acompañado por tipos duros de verdad, pero que sí leen poesía (fíjate: aún no lo hemos presentado y ya me están llevando la contraria), porque en la mesa estarán el periodista Juan García Luján (que, por cierto, hace un cameo en el libro), el escritor y cineasta Carlos Álvarez (que presentó el primero y, además, fue uno de mis primeros mentores literarios) y el músico Ginés Cedrés (quien no solo es bibliotecario, sino que es amigo de la adolescencia y uno de los primeros fans declarados de mi rufián de la calle Murga). Estoy muy contento de que sean ellos quienes lo presenten, pues, por distintas razones, los considero a los tres como una especie de llaneros solitarios de la cultura, en contra de la solemnidad, los estiramientos de cuello y las reverencias forzadas.»
Les aseguro que yo no me la voy a perder por nada del mundo. Me apetece saludar a Eladio en persona.